martes, setiembre 30, 2008
y quién sabe si puede o pudo haber vida en marte...
Y qué si quiero recordarte
me volví a dar cuenta
que puede o pudo haber vida en marte
y qué si quiero encontrarte
yo solo estoy sintiendo el viento
y jugando con aquellos ratitos
que ahora son de blanco y negro
y qué si quiero saludarte
no va a ser un delito solemne
solo te diré que no hay pausa
que la distancia puede ser cobarde
pero el tiempo no es canalla
y qué si quiero olvidarte
solo sabré que existes donde tu quieres
y que no existes
donde yo te quiero
¿y si quiero escribirte
un último beso
un último abrazo?
y qué, si es inevitable el trazo
y a veces cabes por cualquier lado
solo me iré a volar con mi propio parapente
y quién sabe,
todavía es setiembre
y qué
si ayer este cofre enmendado
se guardó de nuevo tus claveles
cuando miraba por la calle siete
y qué
si puede o pudo haber vida en marte,
y ahora te silencio con mi palabra
y con mi palabra te pienso.
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1 comentario:
Y qué si a presión aumenta la vida marciana y dejas de pronunciarlo y dejas de establecerlo solamente por el hecho de no escribirlo, y qué si la nieve de marte haya sido un preámbulo de vida y los habitantes de aquel planeta (de aquel sol) se hayan marchado hace siglos de su base marciana y se hayan establecido aun más lejos y qué si lo piensas y al pensarlo lo bautizas.
Qué si la muerte
qué si la razón...
Mil saludos.
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