viernes, abril 27, 2007

Tu, solitario

Aunque no es novedad…ahora si tengo la potestad, la siento de nuevo; triste con razón [lo mismo digo]
[Adiós amor la claridad me va a matar…] tarareo con la voz contrapicada, espero que vuelvas con otra cara, otra voz, otro color, otro día, cuando puedas abrazarme, cuando puedas escucharme, lo repites, una y otra vez.
Hoy no…el acceso me sabe a restringido, hoy todo esta mal entendido.Y es que entiendo menos que ayer, y cada día menos… ¿y quien no se ha entendido alguna vez?, me preguntas.
La voluntad de irme incrementa contenta, de lo que esta a punto de lograr, ya lo sabrás…se muda entera, insistes.
Miran bien todo este pálido suelo, en este interminable y olvidadizo suelo nada me embarga, te excusas.
Este adiós penará, aun espero dejarlo libre para siempre…se empolvara mi adiós y de este adiós me destierro…, te sentencias.
Nada de esto es novedad…no te conocía y, cuando el transcurso en vida vivía. No terminé de hacerlo, te rindes.
Agregar a este sitio claridad, yo solo quería empeñar toda una vida mi soledad, háblame…, ¿acaso no quise decirte que yo olvidaba constantemente no olvidarte? Contéstame..., nadie me ha quitado tanta voluntad, nadie de quien yo no pueda dejar de pensar sin voluntad, argumentas.
Nadie del aire o del cielo, nadie del agua pero si del suelo. Tierra adentro, mar seco. Y a todo esto, yo solo he querido preguntarte -¿como se siente menos?-

Vapor de Abril

Mientras el color de sus ojos se evaporaba lento, la tierra me hacia un llamado. En ese instante descubría que mi andar seguía frío -no has llorado-, me dijo. -Y si después de meses vuelves a escribir-, no te lo imaginas. No es sencillo, (siempre dices lo mismo). Lo único...es que tal vez tenga que esperar otro abril, le dije.

Y te fuiste, pero es como si hoy me despidiera de ti; Abril, (sonabas como una canción). Voy desenredando los hilos de significado que dejaste y, me ovillo al sueño donde recupero lo que aún no he robado…(exagerado).
Cuando lloraste con un cuidado acumulado…cuando vuelves a ser cualquier mes, cualquier mes, menos Abril, el que se me note. (Setiembre, ¿puede ser?)
Hasta la misma mañana, la mirada no bajaba la guardia, -a ti te consta-, le dije.

miércoles, abril 25, 2007

6 y 45

Aún recuerdo mi cara partida,
Mi cansancio nada contenido,
Los segundos que de soledad,
Yo huía, implicada suerte sin querer,
Del tardo ascensor, tarde me libré.

Fueron simples palabras,
Netas y decisivas palabras
¿Decisivas, he dicho?
El continúo,
Yo seguía varada.

Fui a parar a presenciar su voz y,
La hora disimulaba y,
Aun seguía varada.

El rió, camino hacia mi y,
Yo seguía varada
Yo respondí, al fin.
Mientras seguía varada.

Fue un momento que escuche,
Y por eso, más no solo oí,
Pues dentro de lo que no existió
Algo existe, y ahora,
Porque aún, sigo varada.

lunes, abril 16, 2007

En los zapatos de Camargo



Otra vez estoy aquí contemplándote tras el visor de mi telescopio, todo mi tiempo es para ti. Estas allí mirándote al espejo, haciéndote masajes. Ahora te preocupas más por tu cuerpo, has cambiado de hábitos. Usas cremas, te estiras, te la pasas escribiendo en la computadora.
Estos días me he sentido cansado, el somnífero que me recetó el médico no lo tomaré, tendrá un mejor fin, te hará pagar.


Quien es el otro, seguro es más joven. Estoy aplacando mi rabia, estoy en tu cuarto, el que yo conozco como la palma de mi mano, como tu cuerpo.
Los papeles y tus notas me desconciertan, por que tanto interés en temas religiosos, has escrito “la peor soberbia, es creerse dios”. Tus postales dirigidos a ti misma. Por que tienes recortes del caso Pimienta, tienes muchos.


El jugo que tomas todos los días por la mañana esta esperando el polvo que echaré con mis manos. Te he descubierto. Soy engañado. Mi hija me llama desde Chicago enferma de leucemia y sin embargo no sé porque sigo aquí al frente tuyo, mirándote. He pensado filmarte, ya no tendría solo imágenes, tendría también tu voz, tu respiración, tu silencio, y todo eso, solo para mí.

Reina ha venido a mí, esta vestida como monja y, aun así la encuentro bella. El reportaje del monasterio es suyo. Es una buena periodista, ha adoptado aptitudes mías, pero el director del diario soy yo. El diario o yo, es lo mismo.


El tema del monasterio ha sido un éxito, valió la pena que Reina se hiciera pasar por la prima de la dama benefactora. Ha descubierto al presidente ante el cura. Su fe esta siendo burlada le informo. La mística ha terminado. Ahora todos saben cuanta calaña hay en el país.


La noche era más fría, el camino no quería que llegue a ella. En la mesa, solo los dos. Me confesé. Todo me pareció confuso cuando empecé, parecía adolescente, mis manos temblaban. “Te quiero a mi lado Reina”, ella pareció mas confundida aún. Hablamos muy poco. Ella decidió irse a su cuarto. No me di por vencido. Su cuarto esta a mi lado, su cuarto y mi cuarto.

Me apresure, hice ruido. Toque su puerta, -tu trabajo del monasterio no va a salir- le dije. Ya sabía como reaccionaría. Abrió la puerta, dio en el blanco. La abrasé, la bese y la noche siguió a su lado. Al amanecer ya no estaba ella. La deteste más. Ahora si me la iba a pagar. De todas formas ya faltaba poco.


Se tomo su jugo y pasó todo lo que mi coraje me hizo planear. El sin techo hizo lo suyo. A cambio pasaportes y viajes para él y la otra tipa a la que nunca le gusté. Había otro. Yo lo supe y Maestri también.

sábado, abril 14, 2007

Escribir, A Veces Solo Me Importa…


Una historia que te contaré después


Antes, durante y después de mí siesta tanteo mi ida de esta historia;

Dadivosos y eso es mucho,
Rayos! Que es esto! Y eso es poco.

No he podido ser más clara o
Complicada, indiferente, cursi, soberbia y niña
La que tú elijas,
Cortante o asustada, con la que te quedes.

No has podido ser más claro o
Complicado, indiferente, cursi, soberbio y niño
El que yo elija,
Cortante o asustado, con el que me quede.

Además de Oliver y Jen

Si te quedaste alguna vez en mis ojos
Porque no sé.
Solo he querido,
Que alguna vez, en tus ojos me quede.

De soledades concurridas Mario.

Esta sólida procesión
Que esta pronta a una conquista partía
Como un arte de guerra…
Aparentemente lúcida, pero tristemente cóncava,
Porque conclusivo, concatenado algo queda
Pero acaso,
Esto supone;
Y me queda,
Esta soledad tan concurrida.

miércoles, abril 04, 2007

Décimo turned down

“Al extraño, al de alguna vez…al que no me explico y creo querer”
cLaV!

Ella quiso regalarle su entusiasmo de un libro,
Y todo estuvo frío
E hizo cubitos de hielo
Del fallecimiento de aquél cuantas veces
Detestable silencio eufórico.

Al ver cuan distintos se conocieron,
La descarada y profunda huída
En el posible desgano
Y las dudas hervían
Y las líneas oblicuas, multicolores, pre-sentían.

Al ver cuanta pesadilla en este alivio
Aún no termino y temo no observarte.